¿ Vender o alquilar? Muchas veces nos entra la duda de si la vivienda que hemos heredado o comprado como inversión deberíamos venderla ahora o alquilarla. Veremos que eso depende de varios factores que debemos valorar antes de tomar una decisión.
¿Qué tener en cuenta para decidir si vender o alquilar?
- Tiempo: actualmente el tiempo en el que se vende una vivienda está entre un día y 12 meses, según el método que sigamos, la zona, el tipo de vivienda y su precio. Hay quien prefiere alquilar para no correr con los gastos fijos que supone un inmueble vacío (cuidado, un alquiler supone el mismo pago de IBI, impuestos y mantenimiento) y quien prefiero adecuarlo para la venta.
- Patrimonio: en algunas ocasiones puede interesar mantener la vivienda como propiedad para recurrir a ella más adelante. En otras, como en el caso de herencias, separaciones o divorcios, puede ser más lógico venderla.
- Rentabilidad: comprar una vivienda para luego alquilarla es cada vez más común. Nos puede dar una rentabilidad mayor al 4%.
- Tranquilidad: a no ser que elijamos un servicio de gestión integral del alquiler, si alquilamos nuestra vivienda vamos a tener que estar pendientes de renovaciones de contrato, averías, mejoras de mobiliario, búsqueda de parte inquilina…
- Burocracia: el papeleo relativo al alquiler es más sencillo, pero hay que actualizarlo periódicamente. El relativo a la venta es más complejo y requiere más documentos, pero se realiza sólo una vez.
- Miedo: muchas personas no alquilan su vivienda por miedo a los impagos, pero la Ley de Arrendamientos Urbanos introdujo en 2013 medidas que protegen mejor a la parte propietaria.
- Necesidad: unas veces necesitamos vender una vivienda para comprar otra o para hacer frente a otras necesidades y otras nos interesa alquilarla para tener un ingreso estable y constante.
Ventajas de vender
- Recuperación del mercado: el mercado de compraventa empieza a recuperarse y los precios suben ligeramente tras el descenso de la crisis. Actualmente, la demanda es mayor que la oferta y eso hace que el poder de negociar vuelva a recaer en la parte vendedora.
- Vender para comprar: si se vende y se reinvierte en otra vivienda de residencia habitual se evita pagar impuestos por incremento patrimonial.
- Reparto fácil y rápido: vender es la mejor opción cuando la propiedad pertenece a varias personas que no quieren habitarla, como es el caso de herencias o divorcios. Se vende la propiedad, se reparten las ganancias y todo solucionado.
Ventajas de alquilar
- Estado del mercado: El número de personas que viven de alquiler ha aumentado en los últimos años manteniéndose en número cercanos al 20%
- Renta garantizada: el alquiler supone una fuente continua de ingresos.
- Mantiene el patrimonio: la vivienda siempre será suya y se puede transmitir entre generaciones.
- Rentabilidad pura y dura: según el Banco de España, la rentabilidad bruta por alquiler se sitúa en 2017 en una media del 4,4%
- Aval hipotecario: una segunda vivienda puede servir de aval si se pide un préstamo bancario. Además, se puede pagar la hipoteca de otra vivienda con la renta de la alquilada.
- Fiscalidad: si vendemos la vivienda habitual y no lo reinvertimos en otra vivienda, se considera incremento del patrimonio. Pero si la alquilamos, obtendremos ventajas fiscales.
- Mantenimiento: los costes de mantenimiento de una vivienda alquilada frente a una vacía son menores, pues se detectan antes. Además, se evita atraer okupas y ladrones.
- Trámites sencillos: la documentación necesaria para un contrato de alquiler es sencilla y tu tramitación rápida.
Si aún te quedan dudas sobre si vender o alquilar tu vivienda, acércate a nuestra oficina o llámanos al 948 23 13 13, nuestro equipo está preparado para orientarte en la mejor opción para ti.